Taller de Musicoterapia en el Centro Social José Encina Alfonso

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ASOCASAX, en colaboración con la Concejalía de Bienestar Social inicia con gran éxito un taller de Musicoterapia

El taller está dirigido por Abigail Medrano Vivas, licenciada en clarinete con gran experiencia en cursos similares con poblacion discapacitada intelectual.
Los interesados pueden dirigirse al Centro Social José Encina Alfonso los lunes o llamar al teléfono del presidente de la Asociación (esta información se la facilitarán los técnicos del ayuntamiento)
 La musicoterapia enriquece la vida, y por ese motivo es necesario que el niño disminuido intelectual, esté rodeado de un ambiente musical rico y controlado en estímulos, ya que ésta experiencia sensorial es lo que le va a proporcionar un desarrollo emocional, psicofisiológico y social equilibrado.
La musicoterapia se emplea de tres formas. 1. Activa: el niño juega, canta, manipula instrumentos u otros objetos. 2. Receptiva: el niño escucha. 3. Receptivo-activa-interdisciplinar: como apoyo a otras actividades (dibujo, expresión corporal, modelado…).
El objetivo de éste proyecto es lograr que mediante la música despierten capacidades integrales del niño, en el campo cognitivo, procedimental y actitudinal que además de ampliar un repertorio de conocimientos amplíen el campo de acción hacia un tipo de expresión que le ayude a canalizar y reflejar tanto sus capacidades como sus aptitudes.
Por último decir que mediante la aplicación de la musicoterapia se ha podido constatar que muchos niños han mejorado considerablemente su deficiencia intelectual. La acción beneficiosa que ejerce la música en los niños es muy eficaz para lograr su desarrollo emocional, y mejorar sus percepciones y motricidad, así como su afectividad; favorece la manifestación de problemas actuando como alivio y disminuyendo la ansiedad, y consigue un mayor equilibrio psicofísico y emocional, ya que logra que se establezca una comunicación a través del arte que es más inmediata y profunda que la palabra, además de estimular el rendimiento corporal y el riego sanguíneo cerebral.
Mediante ésta actividad provocaremos sus primeros gestos de baile, de composición musical y de canto, generando unos sentimientos que les ayudan a reforzar su autoestima porque tocar un instrumento estimula la liberación de emociones y da al niño y sentimiento de logro. El canto supone una vía a la comunicación verbal y el baile, además de cumplir una función básica de coordinación de movimientos y refuerzo del tono muscular, contribuye a desarrollar la creatividad e incluso a potenciar sus relaciones sociales.
La musicoterapia facilitará la expresión, la integración, la coordinación y romperá el cerco de incomunicación que a veces existe entre éstas personas y el resto de la sociedad.
 

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